50 AÑOS CREYENDO EN TI.

1968/69 – 2018/19

 El pasado 27 de abril se celebró en el C.M. BERROSPE la clausura del cincuentenario y curso académico 2018/2019. Gracias a Congregación de las Hijas de Jesús, a la Dirección del centro y sus colegiadas por la cariñosa invitación. Acudimos a este encuentro un gran número de invitados, desde antiguas directoras hasta colegialas. Fue un gran día de convivencia que pasamos con mucha alegría por poder compartir y volver a disfrutar nuestras vivencias, experiencias y recuerdos. Inmediatamente nos habíamos trasladado a nuestra época de colegialas, estábamos de nuevo en nuestro querido “Berrospe”.

El colegio se había preparado para la ocasión, estaba ambientado con frases de Santa Cándida María de Jesús, vitrinas con objetos de la institución, cerámicas propias del C. M. Berrospe, etc. Además pudimos ver una importante colección cronológica de fotografías dónde se podía observar la evolución del colegio a lo largo de estos 50 años.

Todo comenzó a las 14 h, con un gran y acogedor recibimiento en el hall del colegio por parte de la Directora Dña. María Teresa Ortega. Seguidamente disfrutamos de una comida en nuestro antiguo comedor, incluso estaban las bandejas tan características que teníamos en mis tiempos de colegiala. También, tuvimos la oportunidad de hablar entre nosotras, charlar de nuestra etapa en el colegio y cómo nos preparó para enfrentarnos a la vida. Al igual que cuando yo vivía allí, se oían murmullos, risas y algún otro grito también.

Al terminar, hicimos un recorrido por el colegio acompañadas de algunas colegialas, mientras que refrescábamos nuestro pasado. Hablando con las chicas, lo que más me llamó la atención fue que la esencia del colegio y sus valores no habían variado nada. Entonces, ¿qué ha cambiado en estos 40 años desde que me fui? Lo único que había cambiado era la modernización y actualización de las instalaciones de acuerdo a las necesidades de los tiempos que vivimos. Continuamos con un ameno café en hall, repleto de historias y anécdotas; algunas que desconocía y otras que aunque ya eran conocidas por todos, no nos cansábamos de repetir una y otra vez. Nos dejamos llevar por la maravillosa nostalgia que nos evocaba el estar las mismas paredes que nos habían visto madurar años atrás.

A media tarde tuvimos la Eucaristía, fue un momento emotivo y familiar. Me sorprendió ver la capilla repleta de personas que como yo habían recibido la palabra de Dios y sus enseñanzas gracias a la Congregación de las Hijas de Jesús. Me sorprendió con agrado la ofrenda de becas y la incorporación del nuevo logo, diseñado para el aniversario de los 50 años; la eucaristía estuvo presidida por el Decano de las facultades de Teología y Derecho Canónico de la Universidad Pontificia de Comillas: P. Enrique Sanz. Sj.

Seguidamente pasamos al salón de actos, continuando con el acto Académico. Fue una charla exquisita donde se habló de la importancia y la influencia de los colegios mayores en la historia. Gracias a la Dra. Dña. Ana García–Mina Freire (Vicerrectora de Servicios a la Comunidad Universitaria y Estudiantes de la Universidad Pontificia de Comillas.), a Dña. María Teresa Ortega Santamaría FI (Directora del C.M. Berrospe) y a la Dra. Dña. Ana María Carabias Torres (Doctora en Historia y Filosofía de la Universidad de Salamanca.) por una disertación maravillosa, muy trabajada y fascinante. Cabe destacar, lo bien documentada que estaba y lo bien que se comprendía gracias a las diapositivas. Pudimos entender la importancia de los colegios mayores en el desarrollo de la universidad, el apoyo mutuo de ambas instituciones y sus funciones desde sus comienzos. Especialmente, me sorprendió como en su origen los colegios mayores ayudaban a las familias más desfavorecidas y con falta de recursos para que sus hijos pudieran acceder a estudios superiores. Además, Dña. Ana María Carabias insistió en la importancia de que todo estudiante universitario pasase al menos un año conviviendo en un colegio mayor, y nos felicitó por la suerte que habíamos tenido. No puedo estar más de acuerdo con ella. A continuación, tuvimos unas emotivas palabras de la Decana, Dña. Adriana Vargas Garbín, la imposición de becas y el Gaudeamus Igitur. Terminamos nuestro precioso y delicado encuentro con una estupenda cena y una maravillosa orquesta en las pistas del colegio, que arrancó algún que otro baile.

No puedo terminar sin dar las gracias a La Congregación de las Hijas de Jesús, por esta acogida. Un recuerdo grato y oración para todas las Directoras, religiosas y colegialas que nos han dejado a lo largo de estos años. Gracias Hermanas por estos 50 años. ¡Qué suerte tuvimos! Poder convivir, disfrutar, aprender y sobretodo que el C.M. Berrospe se convirtiera en nuestra casa.

Lola Nuño de la Rosa (Antigua Colegiala)